El otro día estuve pastoreando... No es que haya desistido de mi tesis y haya decidido, en un arrebato bucólico, dedicarme a la vida pastoral, si no que todo surgió de manera casual...
El domingo pasado nos fuimos de ruta, bueno, aquello fue más bien un paseillo (de unas 5 horas, pero no dejó de ser un paseillo), y acabamos guiando a un grupo de ovejos...Nuestra intención era pasar al lado, pero yo creo que los bichos, al vernos llegar con los bastones y demás, asumieron que íbamos a recogerlos, y a andar que echaron... entre ellos un carnero con unos cuernos muy lucidos (y a mis temorosos ojos, amenazantes... XD). Nos echamos unas risas, hasta que, llegando al final del camino (y al pueblo al que nos dirigíamos) nos encontramos con aún más ovejos, y ahí es cuando salieron a nuestro encuentro dos estupendos mastines luciendo dientes (todo el camino preguntándonos cómo es que no habría perros...), y ahí nos dimos la vuelta. Fin de mi experiencia pastoril.
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Esta anécdota viene a su vez a relacionarse con un asunto que me ha indignado (otro más para la infinita lista... XD). A través de un portal de empleo (que aún no se me ha acabado la beca, pero hace años que colgué unos CVs) me llegó un documento... que yo definiría como polémico. Dicho documento es una guía de búsqueda de empleo, o más bien de nuevas profesiones. En el susodicho se habla de la enseñanza, y se dicen cosas que comparto, como que en este país hay mucha titulitis, y que la enseñanza (superior) se está devaluando de tal forma que hoy en día cada vez se regalan más títulos (yo eso lo he visto desde dentro, en distintas carreras, facultades y universidades...). Pero luego añaden cosas como:
En el colegio se aprendía y se aprende, de forma estandarizada, para servir de forma eficiente
a un sistema estandarizado de producción tipo cadena de montaje
Las reglas antiguas, te decían: se limpio, cumple las normas,
no destaques y el sistema fábrica te recompensara con un empleo, te protegerá, y te dará
una seguridad, un reconocimiento social...*
El modelo “todos iguales” está pensado para premiar el borregismo de corte industrial.
La cosa es que 'esta gente' afirma que las escuelas, que han supuesto y suponen la alfabetización y enseñanza de la población, que se supone les educa para que puedan pensar libremente y adquirir conocimientos que les permita acceder a puestos sociales y laborales más allá de la servidumbre de la Edad Media, no son más que máquinas de hacer borregos. Según 'esta gente', hay que abandonar las reglas antiguas (¡¡¿¿quién quiere ser limpio??!!, ¿¿en qué trabajo van a apreciar tu higiene personal?? ¿Y para qué seguir las normas? ¡Si sólo son la base de la convivencia en sociedad...!). Y al final descubres que el mensaje es:
No necesitamos grandes y burocráticos centros de enseñanza, regidos por
venerables (y aburridísimos) personajes. Necesitamos centros dinámicos que ofrezcan
disciplinas punteras que nos permitan salir adelante generando prosperidad y felicidad.
Es decir, que lo orientemos todo a la ciencia y la tecnología, que es lo que da dinero hoy en día, y resutados más inmediatos (eso puede no inferirse en estas citas, pero es lo que acaban afirmando).
Mira, que me digan que hay que adaptarse a los tiempos, vale; que muchos maestros y profesores deben ponerse las pilas y no depender de los cada vez más deficientes libros de texto, vale; que en España el sistema de enseñanza a veces es demasiado teórico, vale (aunque señores míos, para eso están los periodos de prácticas y las becas, como transición al mundo laboral -y aquí nadie habla de como muchas empresas te usan para el papeleo y los cafés, y no el trabajo de verdad-, así como los módulos y la formación profesional, de corte práctico y destinados al ingreso directo en el mundo laboral). Pero aún con todo deberían tener más cuidado cuando se dirigen a una insitución que ha cambiado la sociedad y el mundo, como es la escuela/universidad. Yo he tenido profesores 'venerables' que han resultado ser grandísimos profesionales.
Pero lo que más gracia me hace es que acusan al sistema de ser una fábrica de borregos: todos siendo adoctrinados de la misma insulsa manera para acabar donde hacen falta, ¿y sabéis lo que proponen a cambio? Que abandones el viejo sistema para unirte al de las nuevas tecnologías, que es donde, como ellos mismos afirman, hace falta gente hoy en día. Qué originales, ¿verdad? ¡Qué gran respuesta al borreguismo!
¡¡¡Pues ya estoy harta!!! Primero, para que existan ordenadores necesitas ingenieros, que necesitan de una educación superior, así que cuidado con las afirmaciones categóricas de que la teoría está obsoleta y los títulos universitarios son innecesarios. Segundo, ¿y las humanidades qué? Yo crecí pensando que gente como Pláton, Aristóteles, Descartes, Rousseau... eran genios, gente que abrió las mentes del pueblo, que cambió la forma de ver e interpretar el mundo, afectó a la cultura, a las sociedades, movieron masas, impulsaron revoluciones... ¿Y qué pasa con Shakespeare, Cervantes, Borges, Machado, Tolstoy, Julio Verne, Victor Hugo...? La gente se jacta de haberlos leído, pone sus libros en las estanterías aunque sólo sea porque luzcan -ya que pueden no haber sido leídos-, se les llama genios, de nuevo se les atribuye un gran papel social y cultural, se les considera grandes pensadores que influyeron a su vez en el modo de pensar y de ver el mundo... Y en cambio hoy, en España, si dices que estudias literatura te dicen un,
¿y para qué? ¿Qué pasa, que lo tuyo no eran las matemáticas, eh? Pero qué triste por dios... Si Nietzsche levantara la cabeza probablemente afirmaría: "La filosofía ha muerto...", qué gran desgracia.
* Destacaría además las (frecuentes) faltas de ortografía del propio documento, pero
¿para qué sirve la ortografía? ¡¡Abajo con las reglas del lenguage!! Muerte a Cervantes... En fin...
