Soria, el fin del mundo

No amigos, no es que esté vaticinando el fin de los tiempos a través de esta entrada, pero es que parece que ir a Soria es como ir al fin del mundo... El autobús tiene pinta de ser una máquina de tortura, perfecta para el descenso a los infiernos... de hecho, yo creo que no da más rodeo porque no es posible darlo... Y eso las veces que va, que son una al día, excepto los sábados, que no hay bus. Pero claro, ¿¿cuántos más buses van a poner??, ¡¡si les lleva casi todo el día ir hasta allí!!


Pero además es que resulta que no voy a Soria capital, voy a... ¡¡Valdeavellano de Tera!! Sí, por fin sé el nombre del pueblo al que me voy en dos semanas... Y se las trae el nombrecito... Para colmo, el único bus que va de Soria al pueblo sale a las 14:00 h de Soria, y para que os hagais una idea, el bus a Soria sale de León a las 15:45... A mí no me cuadran los horarios, ¿a vosotros?


Bueno, ahora en serio, si alguien de Soria lee esto que me perdone, pero es que no podían estar más incomunicados, al menos de León. La verdad es que el pueblo tiene muy buena pinta, y hasta he estado mirando las casas rurales del lugar y creo que ya sé cuál es la mía (de hecho es que creo que en el pueblo hay 1 o como mucho 2 casas de estas, jajaja). En fin, que tiene todo muy buena pinta, menos el viaje... pero al final lo que haré será ir a Pucela en bus y de allí ya en coche con mi jefe y uno de los profesores. Y para volver los fines de semana... habrá que echarle imaginación, ¡pero algo se me ocurrirá!

Y nada más, aparte de que ya me puedo sacar el carnet de la que vuleva de vacaciones (que para no saber conducir, lo tengo muy bien aparcado :P) porque la vida laboral a pata se hace muy dura.